Recibió discos de Oro y Platino por las ventas de »Sueños Clandestinos»
 
Tres decenas de canciones, en dos horas y 30 minutos, interpretó Yordano en su reencuentro con el público caraqueño. La lluvia que estuvo presente todo el día en la capital venezolana dejó un breve lapso para que el cantautor nominado al Latin Grammy hiciera un recorrido por sus éxitos, cantara temas de su más reciente disco “Sueños Clandestinos” y estrenara un par más.
 
En los espacios abiertos del Centro Cultural Corp Banca sus fans lo esperaban mientras se proyectaba un video y escuchaban el tema “A day in the life” de la banda británica The Beatles, una de las más influyentes en la carrera del italovenezolano.
 
El concierto fue concebido con 6 grandes momentos. El primero incluyó grandes éxitos y la primera canción fue “Por estas calles”, algo poco común en sus presentaciones y que el propio artista comentó en su saludo al público: “no se la esperaban tan temprano”. Los siguientes temas fueron: “Locos de Amor,”  “No la toquen más”, “No voy a mover un dedo” y “Vivir en Caracas”.
 
Con “Tierra de Sol Bendita” inició otra parte del show con las canciones de “Sueños Clandestinos”, álbum que compite en la categoría Cantautor del Latin Grammy. Sonaron: “Llueve sin parar”, “Siempre la Brisa”, “La Banda de los Sueños Clandestinos”, “Si me preguntaran” y “Aire en el fondo del mar”.
 
Los músicos de la banda bajaron del escenario para que Yordano quedara “Solo y de cerca” a sus fans. Este fue el momento más íntimo de la noche y en el que el artista habló más. Allí aprovechó para cantar su versión en español de “Baby It’s You”, éxito del primer disco de los Beatles.
 
Luego hizo un paréntesis para recordar que en su juventud siempre aparecía con la guitarra en las reuniones con sus amigos y como se sentía entre amigos cantó por primera vez la canción “Un gran adiós”, afirmó que era la primera vez que la interpretaba completa, de un estreno pasó a otro y cantó “Finales felices”.
 
El concierto transcurría con la amenaza de lluvia y Yordano continuaba con sus éxitos y siguieron: “Azul” y “Robando Azules”, en honor a la desaparecida Eva Ekvall.
 
Pasado este emotivo momento, regresaron los integrantes de la banda y el espectáculo continuó con “Chatarra de Amor”,  “No queda nada”, “Hoy vamos a salir” y “Aquel lugar secreto”.
 
Tres músicos más aparecieron frente al público para sumarse a la banda y luego de dos décadas las canciones de Yordano volvieron a sonar en vivo con metales. Con la fuerza de la trompeta, el trombón y el saxo se escucharon “A la hora que sea”, “Media luna”, “Madera fina”, “Manantial de Corazón” y “Bailando tan cerca”.
 
Mientras sonaba “Madera Fina” en la pantalla ubicada al fondo del escenario aparecían algunas personalidades venezolanas que están hechas de “Madera fina”, entre ellas: los maestros Simón Díaz y José Antonio Abreu; los deportistas Rafael Vidal y Andrés Galarraga; el escritor José Ignacio Cabrujas y la comunicadora social Sofía Imber.
 
Llegando el momento de la despedida, Yordano dijo que por la lluvia que estaba por venir se saltaría el protocolo de los cierres de los conciertos y ni abandonó el escenario. Así  llegó la hora de cantar el mayor de sus éxitos “Perla Negra” y continuó con “Días de Junio”.
 
Casi para cerrar el show invitó al escenario a Mariaca Semprum para cantar “Otra cara bonita”, escrita “originalmente para una mujer”, dijo el compositor.
 
El final de la húmeda presentación, en la que varias lloviznas no lograron que los asistentes abandonaran el lugar, fue con “Locos de Amor”.
 
Cuando Yordano y sus fans se despedían apareció repentinamente sobre la tarima la periodista Mari Montes, para darle una gran noticia: El disco “Sueños Clandestinos” alcanzó Disco de Oro y Doble Platino, por las ventas con el diario El Nacional convirtiendo a Yordano en el artista de mayor éxito de la plataforma musical del medio de comunicación venezolano.
 
Ese mismo día salió la segunda edición de esta producción musical, en esta oportunidad a beneficio de la fundación Senos Ayuda.
 
Pero el final de la velada fue con una torta en forma de guitarra 335 Gibson y el canto del Cumpleaños Feliz para Yordano. Fue una noche para celebrar tres décadas de canciones, su nominación al Latin Grammy y una año más de vida.