Jim Carrey y Jenny McCarthy tenían aspecto de ser una pareja bien avenida, pero ahora se ha sabido que las apariencias,

en su caso, engañaban. Ambos solían discutir debido a los altibajos emocionales de Carrey, causados por la depresión que atraviesa el actor. El asunto llegó a tal punto que Jenny no pudo soportar la actitud de su marido y ambos decidieron dejar su relación.

La ruptura entre Jim Carrey y Jenny McCarthy sorprendió a los más cercanos a la pareja pues ambos parecían llevar una relación sólida y bien avenida, pero ahora se han dado ha conocer los problemas internos que les llevaron a poner fin a su romance.

«Aunque parecían tan felices en público, entre bambalinas se desarrollaba una historia diferente», han declarado fuentes de National Enquirer.

La depresión que atraviesa el actor desde hace años, y los cambios de humor que le provoca, ha sido la causante del fin de la relación. Jenny no pudo soportar la actitud que su marido mostraba hacia ella y las discusiones eran constantes entre la pareja.

«Los problemas de Jim con la depresión eran una cuestión de importancia para Jenny, y al parecer eso fue lo que colmó el vaso. Estaban siempre rompiendo y volviendo a reanudar su relación».

Y es que los momentos felices se alternaban con otros muy duros que obligaron a la actriz a plantearse el futuro de la relación: «Cuando estaba peor, Jim desaparecía, ni siquiera cogía el teléfono a Jenny, llegaba a esconderse en hoteles o en alguna de sus casas. Jenny estaba siempre en una montaña rusa emocional».

Al final, la inestabilidad del carácter de Carrey pudo con su relación de cinco años, y ahora ambos intentan seguir adelante con su vida: «Jenny es una actriz guapa y con talento que quiere seguir avanzando. Sabe que ahí fuera hay alguien que la puede hacer feliz, sin todo el drama que tuvo con Jim».