Giovanni Scutaro, quien se encuentra en México presentando su nueva colección, apareció luego de la divulgación de una información publicada en la revista Ronda

, en la que un individuo llamado Armando José Salazar hizo una denuncia en su contra -ante el Fiscal Superior del Área Metropolitana de Caracas- por haberlo, presuntamente, contagiado de Sida.

En la denuncia, Salazar asegura que fue pareja durante casi cuatro años del diseñador (a partir del 2005). También afirma que nunca supo que Scutaro estuviese contagiado, y él menos, hasta que se hizo una prueba rutinaria que arrojó el preocupante positivo.

“¿Tiene el virus? ¡Dios me libre! Tengo mis exámenes hechos tanto en un laboratorio particular como en un hospital, según lo pidió él a la Fiscalía, con los que puedo demostrar que estoy sano”, aseguró el diseñador ante las acusaciones.

¿Giovanni conoce a Salazar?, ¿por qué lo acusa de haberlo infectado? Preguntas que, en realidad, son imposibles de pasar por alto.

“Sí lo conozco y tuvimos una “relación” hace mucho tiempo. Él tiene más de un año queriéndome extorsionar. Me pidió 250 mil dólares y, como no se los quise dar, amenazó con destruirme. Hablé con su mamá y su tía y les dije que lamentaba mucho la enfermedad de su hijo y que estaba a la orden para costearle las medicinas, como lo hago con otras personas que me han pedido ayuda y con tres fundaciones, incluyendo dos de niños, con las que trabajo”, aseguró confiado a los medios de comunicación.

Agrega que jamás ha sido un hombre de escándalos, “pero ya tengo a mis abogados trabajando para demandarlo por difamación”. “Él fue un cul**ito. Ciertamente salíamos, viajábamos, pero no era nada formal. Lo conocí porque era encargado de un restaurante que queda cerca de mi oficina. Él era la pareja del dueño y cuando nos conocimos nos gustamos y salimos un tiempito. Pero más nada. Si él dice que fui yo quien lo contagié -cosa imposible, porque no estoy enfermo ni infectado- ¿por qué no utilizó protección? Yo no tengo sexo sin protección”, comentó Scutaro.

Finalmente, añadió que “La gente me conoce y sabe quién soy. No soy persona de escándalos, pero tampoco me dejaré extorsionar. Tengo los cuatro mejores abogados penales del país y ya están trabajando sobre las acciones que daremos a conocer”.

Son acusaciones graves que, por un lado, podrían desprestigiar su carrera. Asimismo, si resultan ser falsas, ayudaría mucho con su negocio.

Muchos se preguntan si este sería algún tipo de publicidad. Sólo queda esperar qué pasa con el caso y cuáles serán sus repercusiones.

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