El actor trató de colarse en concierto de la estadounidense para conocerla


El vampiro más deseado de la saga ‘Crepúsculo’, Robert Pattinson, acudió junto a cuatro de sus amigos al multitudinario concierto que Beyoncé ofreció en Los Ángeles la semana pasada, pero al dirigirse hacia el camerino de la artista para conocerla personalmente, varios guardaespaldas les impidieron la entrada al no tener las acreditaciones necesarias para acceder a la exclusiva zona.

«Robert estaba en el concierto con cuatro colegas, fumando, divirtiéndose y de muy buen humor. Intentó entrar [en la zona de camerinos] para saludar a Beyoncé y conocerla, pero no tenía las acreditaciones adecuadas y no le dejaron entrar. Sus amigos también intentaron colarse para saludarla, pero no les fue posible. Después de que a ellos tampoco les dejaran pasar, [Pattinson] esperó 10 minutos en la puerta hasta que alguien del equipo se percató de quién era exactamente, pero eso solo sirvió para que los responsables de seguridad se reafirmaran en su decisión», aseguró una fuente a la revista In Touch.

El popular intérprete no fue la única estrella que quiso disfrutar de la actuación que Beyoncé ofreció en el Staples Center de Los Ángeles, ya que otras celebridades como Kourtney Kardashian y Kendall Jenner tuvieron la oportunidad de ver el concierto desde primera fila, una privilegiada posición que les facilitó la propia Beyoncé debido a la estrecha amistad que le une a Kanye West, prometido de Kim Kardashian, un vínculo familiar del que no disfruta el decepcionado Robert Pattinson.